Norman Foster, arquitecto británico y premio principe de Asturias de las Artes en el 2009, va a ser el encargado de crear el nuevo templo de Apple en un terreno de 40 hectáreas (antigua sede de Hewlett-Packard) que los de Cupertino han comprado por la friolera de 300 millones de dólares y para que os hagáis una idea, equivale a una superficie mayor de 40 estadios de fútbol.
Esta nueva sede será construida para ubicar a unos 20.000 trabajadores que ya no caben en las actuales instalaciones de 14.000 metros cuadrados.
El diseño de esta enorme construcción es un secreto como todo lo que Steve Jobs tiene entre manos, pero lo que si está bastante claro es que la «Ciudad de Apple» será un lugar sin vehículos motorizados a combustión y por supuesto coni cero emisiones de carbono, algo parecido a Masdar, que se está contruyento en Abu Dhabi.
Estoy ansioso por ver esa ciudad contruida que seguro será un referente tecnológico.
Vía: AppleWeblog