El lema de este autor es «Lo pequeño es hermoso» y buena cuenta hace de ello con sus obras que a la vez de creativas, requieren de mucha paciencia.
Dalto Ghetti a su temprana edad (6 años) utilizaba una hoja de afeitar o una navaja para sacar punta a sus lápices y fue lo que le inspiró para estas magníficas esculturas en miniatura con la mina de los lápices, recordando así su más temprana edad.
Para crear estas meticulosas esculturas, talla con una aguja de coser y una aguja triangular de metal y bajo una luz intensa.
Para llegar a estos resultados solo le dedica entre 1 y 2 horas al día, cuando le viene la inspiración (dice), así que teniendo en cuenta que para hacer la escultura va eliminando partículas de grafito, al terminar la obra pueden haber pasado meses o incluso años.
¿Qué os parece?, ¿podríais llegar a hacer alguna?.